viernes, 30 de agosto de 2013

París para Llevar

Pensé que el miércoles no iba a ver nada de París porque tomaba el vuelo ese día, entonces me había pasado el martes despidiéndome de la Torre, del Sena, de Rodin y su pensador- algo que hice mucho durante mi estadía en París...- Montmartre de noche, y su artista de 70 años que me invitó un champagne a cambio de contarme historias de los 50s en Montmartre, en un café donde yo leía la biografía de Hemingway. Pero no. Quedaba más para ver. 
Cuando pensé que todo había terminado, me dí cuenta- lenta de pensamiento, lo sé- de que mi último día en París se podía llenar con algo más que el vuelo. 
Volví a Montmartre, y busqué el espacio Dalí, de arte. ¡Qué alegría surreal! Pasé una hora y media adorable mirando esculturas y pinturas sacadas de los sueños más futuristas y descabellados del artista de los bigotes más versátiles de la historia. realmente hizo del vello facial una masa flexible para comunicar ideas y manifiestos. inmortalizó la versión distorsionada del inconsciente. incomprendido por el movimiento que fundó y vendido a las grandes marcas, los sobrevivió a todos. 
Una vez más, Montmartre, su monte soleado y sus cafés, me llenaron de buena vibra. 
Ahora sí, con mucha pena, au revoir, París...

1 comentario:

  1. Hola Kari,
    Te enviamos un feliz cumple, atrazado, de todo DAE. Que buen viaje y gracias por compartirlo con nosotros.
    Aquí te espera la primavera de Buenos Aires hoy 25 grados, nos vemos la semana próxima,
    Cariños de todas

    ResponderEliminar